El FC Barcelona está contra las cuerdas. Todo ello, debido a que el escándalo Negreira ha estallado con el auto del juez Joaquín Aguirre, titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona que investiga el caso Negreira. En él afirma que el club azulgrana consiguió "todos los efectos arbitrales deseados" con el pago al que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, Enríquez Negreira.
El delito por el que se le acusa al Barça es muy grave y es que desde El Mundo han informado que puede suponer la disolución del club: "El delito de cohecho se ha consumado al haberse realizado el pago, se demuestre o no la corrupción sistémica del arbitraje español a causa de tales pagos", sentencia el juez.
De confirmarse el delito de cohecho en el Barça por el Caso Negreira, se enfrentan a:
— Jose Padilla (@JosePadi_) September 29, 2023
- Multa (entre el triple y quíntuple del beneficio obtenido, que se calcularía por los ingresos en títulos durante los 18 años).
- Suspensión de actividad.
- Inhabilitación.
- Disolución. pic.twitter.com/LNJlA430tF
De este modo, las pesadillas de los culés se pueden hacer realidad. Más allá de una hipotética sanción deportiva, se podría llegar a la desaparición de la entidad, un aspecto que supondría el fin del Barça.
Joan Laporta, al borde de ser imputado
Todo este escándalo también repercute a Joan Laporta. No hay que olvidar que él aumentó el sueldo a Enríquez Negreira cuando accedió a la presidencia del club blaugrana. Por ello, el presidente tiene motivos para estar nervioso.
La situación en la ciudad condal es de puro nerviosismo. La bomba ha estallado y todo puede pasar. Es el mayor escándalo de la historia del deporte español.