Luis Rubiales concedió una entrevista a El Chiringuito de Jugones después de que el programa deportivo de Josep Pedrerol se desplazara hasta el estadio de La Cartuja, en Sevila, donde tendrá lugar el partido entre Real Madrid y Osasuna. Esta nueva final del conocido como 'torneo del K.O.' sirvió para que el presidente de la RFEF se pronuncie sobre un tema de extrema relevancia.
El 'caso Negreira', uno de los tomos más llamativos del 'BarçaGate', apunta directamente al arbitraje español debido a las actuaciones de José María Enríquez Negreira y su hijo Javier Enríquez, a instancias de los pagos realizados por el FC Barcelona. Estos envíos de dinero ya han sido probados y son el punto de origen de la investigación que la Fiscalía Anticorrupción de Barcelona está liderando en estos momentos.
Luis Rubiales ha sido muy claro en su mensaje cuando le han preguntado acerca de la posible actuación de la RFEF respecto del 'caso Negreira'. La institución reguladora del fútbol español ya se ha personado como parte perjudicada al juicio sostenido contra el FC Barcelona y varios directivos del club azulgrana durante el periodo de casi 20 años que los sucesivos presidentes realizaron pagos a las empresas de Enríquez Negreira.
No le gustó a todos
"Cuando haya que tomar decisiones, no me va a temblar el pulso. No voy a ceder ante las presiones". Estas han sido las palabras de Luis Rubiales, que se ha mostrado muy firme respecto de uno de los escándalos de corrupción más importantes de todo el fútbol y deporte español de toda su historia.
Esta determinación, sin embargo, no ha sido muy bien encajada por uno de los defensores más enconados y entusiastas del FC Barcelona a pesar de las nuevas investigaciones periodísticas y pruebas que los medios de comunicación siguen encontrando incluso varios meses después del 'estallido' del 'caso Negreira'.
Jota Jordi fue 'víctima' de una de las 'pilladas' más importantes de los últimos tiempos, puesto que mientras Rubiales dejaba clara la línea de actuación de la RFEF, el tertuliano del FC Barcelona tenía una cara de pocos amigos y de no estar muy de acuerdo con lo que Luis Rubiales estaba declarando en aquellos momentos.