El parón de selecciones del mes de septiembre ha terminado, por lo que todos los futbolistas regresan a sus correspondientes clubes para continuar con el calendario de la temporada 24/25. Uno de los más notorios, como no podría ser de otra manera, es Kylian Mbappé: el atacante de Bondy ha viajado de vuelta a la capital de España envuelto en gran polémica.
Sobre todo por las llamativas críticas que ha recibido en Francia, su país natal. Además de aparecer como suplente en la victoria del combinado nacional galo contra Bélgica, su discreto papel en el Francia-Italia, un choque disputado en el Parque de los Príncipes que terminó en derrota, ha permitido que algunos aficionados centren sus protestas en el futbolista merengue.
🚨 El Real Madrid confirma que Kylian Mbappé ha llenado el Bernabéu con más de 80.000 aficionados. pic.twitter.com/6gFBVWY0dc
— Defensacentral.com (@defcentral) July 16, 2024
La réplica de Mbappé ha sido tan madridista como contundente: "Ya estoy en casa. ¡Hala Madrid!". El mensaje que transmite el recién llegado a la plantilla entrenada por Carlo Ancelotti deja claro dos puntos. El primero es la impermeabilidad respecto de las críticas que pueda recibir de los aficionados en Francia.
Maniobra inesperada
El segundo es mostrar su inquebrantable compromiso con el Real Madrid. Después de un larguísimo culebrón de siete años, el equipo blanco ha conseguido hacerse con sus servicios como agente libre: tiene mucho que demostrar a los aficionados merengues y es consciente de ello.
Esa es la explicación de unas palabras que Josep Pedrerol ha analizado al principio del último programa de su tertulia deportiva nocturna. La breve reflexión con la que el periodista abre 'El Chiringuito de Jugones' da cuenta de "qué listo es": Pedrerol remarca la capacidad de Mbappé para adaptarse a casi cualquier situación... y dejar claras sus prioridades de cara a la galería.
🚨🚨El entorno de Mbappé ha reaccionado a lo que ha dicho Al Khelaifi https://t.co/ADhs0NzYv2
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Ahora solo tiene que demostrarlo en el terreno de juego: la racha de tres partidos sin marcar, entre la final de la Supercopa de Europa y el choque de Liga contra el Real Betis, es algo que no puede volver a repetirse. Sobre todo porque los pupilos de Carlo Ancelotti cuentan con él para aliviar una situación que podría volverse crítica si las cosas no cambian.