El Barça se saltó el pacto: la celebración fue una provocación

El Barcelona celebró el título en el campo y acabó realizando una provocación a la afición del Espanyol

Jorge Sánchez
15 de Mayo de 2023
El Barça se saltó el pacto y la celebración fue una provocación
El Barça se saltó el pacto y la celebración fue una provocación

En el día de ayer se vivieron unas imágenes vergonzosas en el campo del Espanyol. Allí se disputaba el derbi catalán en el que el Barcelona necesitaba la victoria para proclamarse campeón de Liga. 

Debido a la delicada situación del Espanyol por estar en descenso, ambos clubes y los Mossos habían acordado que la celebración del título se realizaría en los vestuarios. De esta manera, se evitarían conflictos con la grada local. Así lo contaba el periodista Gonzalo de Martorell en 'El Chiringuito'.

Ni caso al protocolo

Tras finalizar el partido, los jugadores del Barcelona olvidaron las directrices o quisieron ignorarlas, porque se reunieron todos en el centro del campo y comenzaron a saltar y a festejar. Xavi avisó a su cuerpo técnico para que indicase a los jugadores que había que entrar a los vestuarios, pero cuando llegaron junto a los jugadores, se pusieron a cantar y a gritar con ellos.

La situación cada vez se fue poniendo más tensa, y los aficionados del Espanyol que todavía estaban en el estadio, comenzaron a insultar y a increpar a los jugadores del Barcelona. No solo eso, sino que comenzaron a dar golpes a la valla y a romper algunos trozos. Después, saltaron al campo y corrieron en dirección de los futbolistas blaugranas.

 

Ellos al ver la situación salieron corriendo en dirección a los vestuarios, para protegerse de cualquier golpe. La seguridad del estadio y algunos policías hicieron resistencia a la marea de pericos. Por un momento se descontroló totalmente la situación, pero por suerte, finalmente controlaron el conflicto. 

Los aficionados del Espanyol que saltaron al campo se sintieron provocados y humillados por los jugadores del Barcelona, y perdieron totalmente la cabeza al saltar al campo. Comenzaron a lanzar sillas a los cuerpos de seguridad, e incluso uno tiró la cámara de un periodista que estaba trabajando honradamente en el campo.