España ha conseguido algo que solo un país había logrado antes en la historia del fútbol: ser campeón del mundo en la sección masculina y femenina. Este hito histórico del cuadro dirigido por Jorge Vilda, que sobrevivió al famoso 'motín de las 15', ha provocado diversas reacciones que no encajan en el espíritu de unidad que se debería tener como nación.
Esto no toca
Muchos españoles celebran este nuevo éxito del deporte español sin resaltar los equipos en los que militan de forma habitual todas las jugadoras elegidas por Vilda para enfrentarse a Inglaterra en la final del Mundial de Australia 2023. Sin embargo, la cuenta oficial de Twitter del Barça sí lo ha hecho, sumándose a una tendencia que irrumpió en redes sociales poco después de la victoria mundialista de 'La Roja'.
Esta reivindicación de la "influencia del Barça" en los títulos conseguidos por la Selección ha causado bastante polémica, puesto que se deja caer que los dos Mundiales fueron conseguidos única y exclusivamente gracias a los y las futbolistas azulgrana, sin importar que los jugadores de otros equipos estuvieran presentes y tuvieran actuaciones clave en varios partidos.
Recordatorio
No todos han caído en esta 'trampa', especialmente después de que la actuación del Mundial de Australia 2023 esté marcada por una madridista: Olga Carmona. Ella fue la responsable de marcar el único tanto del combinado español en la final contra Inglaterra. Su ausencia quizá habría evitado la victoria y habría privado a todos los españoles de un título que disfrutan a día de hoy.
En el Mundial masculino también sigue habiendo mucha polémica, sobre todo cuando se trae a colación las paradas de Iker Casillas contra Paraguay, en fase de grupos, y contra Holanda en la final: el 'Santo' de Móstoles evitó un gol que hubiera sido fatal para las aspiraciones de los pupilos de Vicente del Bosque.
Esta respuesta deja claro que la reinvidicación interesada de títulos para diferentes clubes es un motivo de polémica y que divide más que une a una población que no mira los colores a la hora de celebrar un trofeo conseguido con mucho esfuerzo y después de tantas dificultades, tanto deportivas como extradeportivas.