El curso recién ha comenzado y el Barcelona continúa sumido en una gran crisis deportiva, institucional, política y económica de la que aún no ha podido salir, lo que claramente preocupa a sus aficionados.
Joan Laporta llegó a la presidencia de la entidad azulgrana lleno de promesas y sueños, pero la realidad claramente le ha retratado, golpeando fuertemente su figura.
El daño dejado por Josep María Bartomeu no ha podido ser arreglado por el actual máximo dirigente culé, pese a la gran cantidad de 'palancas' de las que ha estado tirando en los últimos años.
El problema añadido es que Laporta es un experto en vender humo, algo de lo que se ha defendido pero que nadie le cree.
"Yo no creo que se haya vendido un excesivo optimismo. Nosotros explicamos lo que hacemos. Me gusta generar ilusiones y estar contentos con lo que se cumple respecto a lo inspiramos", expresó el presidente culé hace pocos días.
Los problemas van a más
Sin embargo, cuando el Barcelona parece que ha tocado fondo siempre aparece el Real Madrid para demostrar que la situación culé es aún más preocupante, algo que se ha demostrado después de que se conociera la diferencia de valor que existe entre ambas plantillas.
El conjunto blanco es el equipo con la plantilla más valiosa del mundo, alcanzando un valor de 1.340 millones de euros, seguido por el Manchester City con 1.260 'kilos'.
El Barcelona tienen un valor de plantilla de 875,4 millones, colocándose en el séptimo puesto de la clasificación general de todo el mundo, lo que coloca a cada uno en su sitio.