El enfrentamiento entre el Barcelona y el PSG promete ser uno de los encuentros más emocionantes de los cuartos de final de la Champions League. Con el marcador de la ida favoreciendo al Barcelona con una victoria por 3-2, el conjunto parisino llega a Montjuic con la necesidad de remontar para avanzar a las semifinales.
El equipo dirigido por Luis Enrique buscará darle la vuelta a la ventaja obtenida por los de Xavi en el partido de ida. Para ello será clave que Mbappé esté enchufado, cosa que no estuvo en la ida.
El ambiente en Montjuic seguramente estará cargado de tensión y expectación, ya que ambos equipos luchan por alcanzar las semifinales de la UEFA Champions League tras varios años sin hacerlo.
Los aficionados pueden esperar un emocionante enfrentamiento, con mucho en juego y la posibilidad de seguir avanzando en la competición más prestigiosa a nivel de clubes.
Xavi ya empieza a hacer de 'llorón'
En la antesala del trascendental choque entre el Barcelona y el PSG en la Liga de Campeones, las declaraciones de Xavi Hernández han añadido un matiz de intensidad al ambiente.
El estratega culé, en su comparecencia ante los medios, ha sembrado una pizca de incertidumbre al sugerir que su equipo podría pasar por momentos complicados en el enfrentamiento de vuelta de los cuartos de final.
Para algunos, estas palabras podrían interpretarse como una mera estrategia de motivación, una forma de preparar a sus pupilos para lo que se espera sea un duelo arduamente disputado.
No obstante, la peculiaridad del emisor, un Xavi Hernández cuyo historial tanto como jugador como ahora como entrenador del Barcelona en el que se ha dedicado siempre a excusarse, puede interpretarse como una nueva excusa por si no pasan mañana la eliminatoria.